En un contexto de creciente preocupación por la gestión del agua en Michoacán, el Congreso del Estado ha emitido un llamado urgente a los 112 ayuntamientos y al Concejo Mayor de Cherán para que revisen y renueven los títulos de concesión de agua potable que se encuentran vencidos o próximos a vencer. Esta medida busca garantizar la prestación continua y segura del servicio hídrico en la entidad, donde actualmente existen 547 concesiones vencidas, lo que pone en riesgo el acceso al agua para miles de habitantes[1][6].
Contexto del Problema
La situación es particularmente crítica en municipios como Ocampo, Angamacutiro, Nueva Italia, Tiquicheo de Nicolás Romero, Maravatío y Zinapécuaro, donde el 20% de las concesiones vencidas afectan directamente el abasto de agua potable para uso doméstico y público urbano[1]. La pérdida de vigencia de estos títulos no solo compromete la seguridad hídrica, sino que también representa una amenaza directa al derecho humano al agua, especialmente en zonas donde las posibilidades de obtener nuevas concesiones están restringidas por la ley[1].
Acciones Propuestas
El Congreso ha votado a favor de un Punto de Acuerdo que no solo exhorta a la renovación de los títulos, sino que también insta a establecer mecanismos internos de control, transparencia y participación ciudadana respecto al estado legal y vigencia de los títulos de concesión de agua potable. Esto incluye la publicación proactiva de información sobre los volúmenes concesionados, su vigencia y disponibilidad, a través de medios físicos y digitales accesibles al público[6].
Importancia de la Acción Inmediata
La responsabilidad de garantizar el acceso continuo y seguro al agua recae directamente sobre los municipios, según el artículo 115 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Sin embargo
