La certificación de las Carnitas de Michoacán representa un avance histórico para la protección y promoción de este emblemático platillo, consolidando su autenticidad y abriendo nuevas oportunidades para productores, cocineros y restauranteros del estado. Este reconocimiento, otorgado por la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco), no solo resguarda la receta tradicional, sino que también impulsa la formalidad, competitividad y generación de empleos en la región.
Carnitas michoacanas: tradición y calidad certificada
Para obtener esta certificación, los interesados deben cumplir con estrictos requisitos que garantizan la calidad y el respeto a la tradición culinaria:
- Utilizar cerdos denominados “de carne” con un peso entre 100 y 130 kilogramos.
- Cocinar las carnitas en cazos de cobre o acero inoxidable.
- Realizar una cocción lenta en manteca con sal de grano.
- Presentar documentación oficial como credencial de elector, comprobante de domicilio, licencia municipal, aviso de funcionamiento vigente de COFEPRIS, visto bueno de Protección Civil, constancia de situación fiscal, contrato de agua y carta compromiso, todos vigentes.
La convocatoria para la certificación es gratuita y está abierta a productores, cocineros y restaurantes que deseen formar parte del padrón oficial. La respuesta a la solicitud se otorga en un máximo de 15 días y la vigencia del certificado es de un año, renovable conforme a los estándares establecidos.
Un paso hacia la internacionalización y el turismo gastronómico
Claudio Méndez Fernández, titular de Sedeco, destacó que este distintivo no solo protege un platillo histórico, sino que también busca proyectar a Michoacán como un referente nacional e internacional en gastronomía. Se están realizando gestiones para que la certificación tenga validez en Estados Unidos, país con una gran comunidad que valora la gastronomía michoacana, a través de la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos.
